Y acudimos una semana más, con frío pero contentas.
Enero no esta siendo un mes muy bueno para el grupo, tenemos varios malitos en el grupo, entre liantas y familiares que también están pachuchillos casi montamos un hospital, pero al contrario de hundirnos eso hace que las quedadas todavía nos sienten mejor, recargamos pilas para la semana y hace que estemos activas y con ganas de nuevos proyectos.
Rosie vino solo un rato, pero no se la perdió, porque su marido esta recién operado y su hija además jugaba un partido de basquet importante. En su lugar llego Marisol que llego un poco más tarde y no dio tiempo a enfriar la silla.
Esther P, no pudo venir porque su familia le había regalado un finde en la Cerdanya, aunque nos envió una foto tejiendo en el tren que nos encantó.