Un día, ya hace casi un año, en clase de Patchwork, Marta trajo un estuche de lápices cosido con telas japonesas y unos adornos que me cautivaron por completo.
Me lo copie, con su permiso claro, ella lo había comprado en un kit en una feria y me presto su patrón.
Por supuesto las telas no son las mismas ni los adornos tampoco, el mío tiene mi toque personal, pero me ha encantado el resultado aunque tiene un fallo bastante grande que no voy a revelar, jejeje
Este es el de Marta, primero os pongo el suyo porque siempre hay que poner de donde sacamos las cosas, y esta es mi fuente.
Este es uno de los lados de Marta
el suyo visto desde arriba (fijaros que al lado esta el dibujo del bordado que le hice a Viro para su boda)
y este es el lado opuesto del de Marta
Bien, aquí empiezan las fotos del mío…. espero que os guste….
Lo empece preparando los bordados y las aplicaciones de los 2 laterales, y a partir de ahí empezamos a montar……
Esta es la vista de un lateral, como podéis ver yo le dí un poco más de color
Vista lateral, donde cierra la cremallera, que lleva un colgante de una muñequita precioso
vista del lateral opuesto, me gusta mucho como quedo
Esta es la vista del lado donde el comienzco de la cremallera queda escondida
y esta es la de la parte superior, elegí esta tela que hace una florecita y creo que acerté
y hasta os pongo foto del culo, jejeje, venga, vamos a decirlo más finamente…. de la parte inferior del estuche, a la que le pase unas lineas cosidas para mejor sujeción de la tela con la boata.
El verano pasado, entre otras decenas de cosas, durante la primera semana de agosto, en Palamos, la máquina de coser saco humo.
Compre hule en el mercadillo semanal del pueblo y me decidí a coser neceseres para el verano, para llevarlos a la playa y que no se mojarán ni les entrara arena.
Estos cuadros siempre me han gustado mucho, son típicos catalanes de los que usaban las mujeres en la guerra y la post guerra para llevar las cosas en lugar de bolsas. También se les llamaba «atillos». Yo recuerdo uno de mi abuela.
Así que cuando la vi en plastificado, la compre y gusto tanto en la familia que veraneaba conmigo, que acabé haciendo un montón de ellos de varios tamaños.
Aquí podéis ver algunos de ellos.
empece por estos dos para mi
y estos son solo una muestra de todos los que llegue a hacer, para mi madre, mi tía Mari y mis primas
Y como el año pasado para el día del amigo invisible les hice el protector labial y la postal de Navidad, este año tenía que continuar con mis regalos de agradecimiento para mis amigas.
Pasaban los días y como yo no estaba en mi mejor época, no tenía ni ganas ni ideas sobre que hacerles. Pues bien, 3 días antes de que llegará el día, me llego la luz, me ilusioné de nuevo y pensé, basándome en una idea que había visto en un Labores del Hogar de Carina, en hacerles unas bolsitas guardatodo en tela de saco, muy rústico y Navideño.
Y me puse manos a la obra….
Empece cortando la tela de algodón natural y la de saco
y preparando los saquitos uno a uno
Tuve que comprar pintura de tela y una esponjita para darla, era la primera vez que lo hacía y me encanto el resultado y la técnica
planteo las ropas de algodón con las de saco
Tuve que lavar la ropa de algodón porque el apresto que lleva de nueva podía impedir que la tinta se fijara bien y para ir más rápido la seque en los radiadores.
Como es algodón 100% tuve que planchar uno a uno todos los trocitos, ¡¡error!! tenía que haber lavado la tela y planchado antes de cortar, me hubiera evitado planchar uno a uno los trocitos ya cortados, bueno, para la próxima lo pensaré antes
Y empiezo a estampar con la tinta sobre la tela de algodón, elijo en turquesa, lila y marrón.
Para que los veáis con más detalle
ordenaditos los 23 que hice, eramos 17 pero hice de más por si acaso
Una vez impreso lo que quería poner en cada trozo, hubo que planchar de nuevo para fijar la tinta y que no se borre al lavar
Y apa, a coser, con la overlook. Remate primero todas las bolsitas por la parte superior e inferior, parecía trabajo en cadena, porque ni cortaba el hilo por cada bolsita, salían como churros… jejeje
A partir de ahí corte en tiras el velcro que tenía que cerrar cada bolsita
Y cosí cada trocito a cada bolsa en la parte superior de cada una, tanto en la tapa como en la base
Y por delante con la base del velcro
Y ya cosí también con la overlook, con costura vista, rústica (la tela de saco y el algodón así lo pedían, para mi gusto) el trocito de tela de algodón a la de saco
Y ya por último cosí los laterales de cada bolsita, cerrándolos del todo y acabándolos. De nuevo parecían churros saliendo de la overlook
Mirad lo que iba soltando la ropa de saco, ¡¡pobrecilla mía que sucia quedo!!
Y ya están cosidos, solo queda cortarlos y terminarlos del todo
Y así quedaron totalmente acabados, yo he disfrutado mucho haciéndolos y me gusta como ha quedado el resultado
En la feria Internacional de Patchwork de Sitges 2014 vi por primera vez unos neceseres hechos con tela de tul en la parada de J.Pujol, a partir de ahí se quedaron grabados en mi retina.
Volví a verlos en Creativa Barcelona edición primavera, ¡¡qué sorpresa más grande!!, compre en color negro y estampado de florecillas y a conjunto las cremalleras japonesas que tanto me gustaban y que nunca encontraba donde colocar. A mis compañeras de juegos les gusto tanto, que tuve que volver a la tienda J, Pujol a comprar más para ellas e incluso lo recomendé en Cosint Cosint donde hago patchwork y donde también compraron para vender en la tienda.
El primero que hice fue copia del que había visto en las ferias hechos por J. Pujol, pero cambiando los bordados por los que hace mi máquina.
Distribuí con marcas los lugares donde irían los bordados en el ancho del tul
Hice algunos de los bordados que mi máquina permite
y repetí lo mismo con otros bordados para el segundo neceser de tul negro
Aquí podéis ver los dos modelos
Una vez ya estuve con los bordados cosí la cremallera, no es fácil porque el tul tiene vida propia como el lino, y se mueve bastante, hay que cogerlo bien con agujas
Y aquí podéis ver uno de ellos ya acabado, el que le regalé a mi mami, que se lo merece todo.
Después de haber hecho el negro bordado a máquina, hice estos otros con el tul ya pre-impreso en florecillas y las cremalleras de diferentes colores.
Este lo tiene mi amiga Viro.
Este en rectangular, igual que los negros, pero con la cremallera japonesa en azul cielo
Este más cuadradito en tul de flores con cremallera japonesa en negro
Aún me queda tul y algún día me gustaría hacerme uno para mi en negro.
Estando en el camping el puente del 09 de junio, donde coincidí con Viro, me lleve un libro sobre puntos de ganchillo porque se que a ella le gusta mucho esta técnica.
Viro vio este punto y le gusto mucho y yo también quise probarlo con una pieza pequeña.
Tenía este algodón en rosa fucsia que me encanta y apa, aquí esta….
Hice una tira larga y luego lo cosí por la base y un lateral